"La pérdida de control es siempre el origen del miedo.
...Pero también es siempre el origen del cambio"
James Frey
Tratar de hacer cada vez más, en menos tiempo, refleja una necesidad que requiere atención.
Cuando estas ocupada, también estás exhausta, buscas un sentido a la vida figurando social y profesionalmente, pero puedes estar ocupada y sentirte vacía, apática y sin sentido de felicidad, sin comprender que eres más que lo que te ocupa.
¿Cómo se expresa esta máscara?
Esta máscara aparece en tu vida porque en algún momento del pasado viviste una relación con tus padres o figuras de poder en la cual te sentiste humillada, porque se burlaron de ti, sentiste que los avergonzaste o desaprobaron tu forma de expresarte.
No te confundas, no tiene que haber sido un evento traumático (o puede que si), solo que tu cerebro en ocasiones, interpreta de maneras exageradas eventos diversos para tratar de interpretar el mundo y adivinar como sobrevivir, pertenecer y ser amada.
Esta máscara se expresa en tu vida adulta, como la versión de superwoman moderna, una mujer hiperocupada, exhausta, agotada y por su puesto con su salud fisica y mental menguada....pero a cambio es una persona necesitada y admirada por su inteligencia para asumir todos los retos, energía y buen corazón, de la cual dependen para multiples labores y esto, te mantiene anclada a ese personaje.
¿Qué acciones concretas puedo tomar para dejar de estar “tan ocupada”?
Te propongo estas ideas para empezar a liberarte de esta forma de vida:
1. Ayúdate de una frase que te dé tiempo de pensar antes de comprometerte: quizá te preocupe pasar por descortés si respondes que NO a los pedidos que te hacen, una buena forma de cuidar tu energía y dejar de estar hiperocupada, es usar una frase por defecto (en lugar de Si) que te ayude a crear un espacio para pensar si realmente tienes el tiempo y la energía para involucrarte en otras actividades; usa frases como:
- Te agradezco que pensaras en mí, déjame lo pienso y te respondo en el transcurso del día
- Voy a consultar mi agenda y busco un espacio para programarlo
- un simple y sonriente "No" (no quiero, no me apetece, no me da la gana) también es una opción válida y si a alguien no le gusta, no es tu problema lidiar con ello.
2. Sé clara contigo misma, dado que esta forma de comportarte te ha definido en tu vida adulta, debes ser honesta acerca de si deseas pagar el precio que supone cambiar una parte de tu identidad en favor de tu salud mental. Si sabes de antemano lo que va a suponer este cambio, va a ser más fácil sostenerlo. Ten presente:
- Todo cambio importante debe pasar primero por un cambio de identidad, para ello, debes transformar las palabras que usas para referirte a ti misma, ya no digas que estás muy ocupada, rendida o que no tienes tiempo para nada, empieza a verte como una mujer que puede gestionar su tiempo, incluso para divertirte y descansar.
- Empieza a actuar como esa mujer en control de su tiempo, que sabe decir que no y que prioriza tener una vida equilibrada, así podrás avanzar en tu empeño.
- Acepta que puedes perder seguridades y personas en el camino, porque a nadie que se beneficie de tu disponibilidad, le va a gustar, ni va a aprobar que cambies y van a tratar de "devolerte al camino"
Recuerda, cuando no tienes tiempo para nada, tu vida está expresando un deseo de ser necesitada, de ser aprobada y para esto antepones las necesidades de los demás a las tuyas, a fin de obtener afecto y reconocimiento… y quizá obtengas estos beneficios pero te aseguro que a un alto precio o por parte de personas equivocadas, que solo se aprovechan de tu disponibilidad sin límites.
Empieza a trabajar en esta máscara de mujer hiperocupada, lograrás relajarte, disfrutar de la vida y sabrás quienes están realmente a tu lado, por amor a lo que eres y no a lo que haces por ellos.
Cuéntame, ¿Te has sentido identificada? ¿Qué acciones vas a implementar hoy mismo?
Recuerda, no importa cuánto te resistas, tu destino es florecer.
Te abrazo.
Caro Rendón
Terapia transpersonal para ser feliz